No somos estudio, somos parte de lo que pasa en las calles de Barcelona. No hacemos comunicación gráfica, nuestra percepción natural del mundo es puro diseño gráfico: comemos tipografías, respiramos señalética y soñamos en códigos icónicos. Ya no creemos en la simplicidad y naturalidad de las cosas, todo es fácil y sencillamente natural sin tener que creer en ello.